Lidiando con la ansiedad ante los exámenes | Guía de habilidades de aprendizaje

Experimentar el miedo a una prueba es natural. De hecho, la mayoría de las personas, incluso aquellas que se han preparado muy intensamente, experimentan cierto nivel de ansiedad antes y durante las pruebas. Si bien un cierto nivel de ansiedad ante los exámenes es beneficioso (ya que motiva a los estudiantes a prepararse adecuadamente), demasiado puede ser perjudicial si les impide estudiar, prepararse adecuadamente o concentrarse durante el examen.

Las siguientes estrategias pueden ayudarlo a controlar la ansiedad extrema al realizar pruebas:

Desarrollar buenos hábitos de estudio. Una de las formas más efectivas de lidiar con la ansiedad durante las pruebas es estar adecuadamente preparado. Además de prepararte para las preguntas del examen, el aprendizaje también aumentará tu confianza. Y a medida que aumente su confianza, disminuirá su ansiedad antes de la prueba.

Estar preparado. Si está completamente preparado para la prueba y está familiarizado con cada pregunta que se le puede hacer, su ansiedad disminuirá drásticamente. No hay motivo para sentirse ansioso por el examen para el que se ha preparado. Si está estudiando un tema o concepto que le resulta difícil de entender, comience temprano en el semestre trabajando con su profesor, tutor o tutor para obtener la ayuda que necesita.

¡No presiones! Chocar con el examen la noche anterior es una de las principales causas de ansiedad sobre el examen. Los estudiantes que se toman su tiempo para estudiar regularmente para el examen durante todo el semestre se sentirán menos ansiosos que aquellos que eligen estudiar el día o incluso horas antes del examen. Si estás estudiando una materia difícil (p. ej., química, biología, matemáticas, etc.), es imperativo que comiences a aprender temprano en el trimestre, ya que es probable que te encuentres con conceptos, temas y materias que requieran ayuda externa. Abarrotar puede hacer que no solo esté presionado por el tiempo, sino que también no pueda obtener la ayuda que necesita a tiempo.

Haz los ejercicios correctos. El ejercicio alivia el estrés y mejora el rendimiento mental. También puede aumentar la energía. Si te tomas el tiempo para cuidar tu cuerpo, sentirás mucha menos ansiedad a tu alrededor.

Dormir un montón. Dormir lo suficiente no solo es esencial para una buena salud, sino que también es una forma efectiva de reducir la ansiedad. Por lo tanto, se recomienda dormir lo suficiente por la noche antes de la prueba. Le recomendamos que duerma lo suficiente durante la semana anterior a la prueba. Si no duerme lo suficiente antes del examen, estará cansado, tendrá menos capacidad para concentrarse, no podrá recordar todo y estará más ansioso.

Consiga mucho para comer. Nunca hagas una prueba con el estómago hambriento. No solo necesita los nutrientes que su cerebro necesita para funcionar correctamente y la energía física, sino que hacer la prueba con el estómago vacío hará que le resulte difícil concentrarse en la prueba. Algunos estudiantes se olvidan de comer antes del examen porque no quieren perder el tiempo estudiando en el último momento. No necesita comer una comida de cuatro platos antes de cada prueba, pero al menos tome una manzana u otro refrigerio saludable.

Ser positivo. No se permita ser demasiado pesimista. Mantente positivo y concéntrate en hacer bien la prueba. Si continúa pensando en pensamientos negativos, aumentará su ansiedad y hará que sea más difícil de ejecutar. Si crees que te va mal en el examen, probablemente lo harás. Si tiene confianza en sus habilidades, es probable que se sienta menos ansioso y se desempeñe mejor.

Mantente relajado. Tómese unos minutos para relajarse antes de realizar la prueba. Si está tratando de relajarse, respire profundamente. Tómate un momento para despejar tu cabeza. Concéntrate en algo completamente ajeno a la prueba, o incluso a la escuela. Piense en algo divertido que planee para más adelante en la semana, o tal vez en una excursión divertida que vaya a realizar. Una vez que te hayas calmado, entra y hazte una prueba.

Concéntrese en la experiencia de aprendizaje. No seas demasiado duro contigo mismo si no estás a la altura de tus expectativas en el examen. En cambio, aprenda de la experiencia para hacer los cambios necesarios para el futuro. Nada se puede lograr estresándose por algo que ya pasó.

Pedir ayuda. Si todo lo demás falla, pide ayuda. El miedo severo a una prueba puede ser debilitante para los estudiantes. Si tu mente se queda completamente en blanco cada vez que te presentas a un examen o sientes que te estás desmayando o vomitando, probablemente necesites hablar con tu maestro o consejero. No tengas miedo ni vergüenza de buscar ayuda. La ansiedad ante los exámenes puede ser una condición psicológica real que puede causar que los estudiantes inteligentes y trabajadores tengan un bajo rendimiento académico. No dejes que seas tú.